El Gobierno Vasco ha presentado recientemente los resultados de la Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales (EPDS) de 2014. La principal conclusión es que entre 2012 y 2014 se han agravado los factores que presionan al alza el impacto de la pobreza y la precariedad en Euskadi. Destacamos los siguientes datos:
· Aumentan las situaciones de riesgo en la dimensión de ingresos (mantenimiento), que es la que se relaciona con la insuficiencia de ingresos de los hogares para hacer frente a las necesidades básicas: Los indicadores de la EPDS muestran que entre 2008 y 2014 se produce un incremento de 2,5 puntos en la proporción de personas afectadas, que pasa del 5,7% en 2008, al 7,3% en 2012 y al 8,2% en 2014.
El riesgo de ausencia de bienestar referido a esta dimensión, que se relaciona con las necesidades de gasto requeridas para el mantenimiento del nivel de bienestar mínimo esperado en una sociedad como la nuestra, aumenta, por su parte, en 5,5 puntos, pasando del 16,4% en 2008 al 19,9% en 2012 y al 21,9% en 2014.
· Repunta igualmente al alza la pobreza y la precariedad relacionadas con las condiciones de vida a largo plazo (acumulación): En contraste con la línea descendente que mostraba el indicador hasta 2012, en 2014 repunta al alza la tasa de pobreza de acumulación, que habiendo sido del 1,5% en 2008, cayó hasta el 1,4% en 2012. En 2014, en cambio, crece hasta el 2%, reflejando así la primera subida asociada al período de crisis.
· Como consecuencia de esta evolución, en 2014 se produce un nuevo aumento de la tasa de pobreza real, que ofrece una aproximación al impacto real de estos fenómenos, más allá de los factores de riesgo en una u otra dimensión. Los procesos descritos se traducen en un nuevo incremento de las situaciones de pobreza y ausencia de bienestar reales entre 2012 y 2014: La tasa de pobreza real aumenta desde el 4,2% de 2008 al 5,3% en 2013 y al 5,9% en 2014. Así, el número de personas afectadas supera las 127.000, un 42% más que en 2008.
La tasa de ausencia de bienestar real, por su parte, pasa del 8,2% de 2008 al 10,1% en 2012 y al 11,5% en 2014, hasta afectar a casi 250.000 personas (+41,1%).
· En el período 2012-2014 la crisis empieza a poner en entredicho los avances observados hasta 2008, apreciándose, por primera vez desde que se realiza la EPDS, procesos destacados de movilidad descendente en Euskadi: El hecho decisivo es que mientras que entre 2004 y 2012 el declive se vincula, en lo fundamental, con un aumento en el peso relativo de la población que accede a una situación de completo bienestar (pasa del 26,7 al 37,4% de la población), entre 2012 y 2014 la situación cambia: la caída del 34,5 al 30,2% del peso social de la población con un bienestar casi completo sólo se traduce en un aumento de 1,3 puntos del grupo en pleno bienestar, mientras que el resto se traslada a las categorías de menor bienestar.
La EPDS destaca que, al mismo tiempo, crece la desigualdad en la distribución de los ingresos, fenómeno que refleja la concurrencia de la citada movilidad descendente de una parte de la población y el avance de otra hacia el polo definido por el completo bienestar.